Yo sueà±o con los ojos
Abiertos, y de dà­a
Y noche siempre sueà±o.
Y sobre las espumas
Del ancho mar revuelto,
Y por entre las crespas
Arenas del desierto
Y del leà³n pujante,
Monarca de mi pecho,
Montado alegremente
Sobre el sumiso cuello,-
Un nià±o que me llama
Flotando siempre veo!